Borrar
Sergio Tejera conduce el balón ante el internacional panameño Bárcenas.

Ver fotos

Sergio Tejera conduce el balón ante el internacional panameño Bárcenas. ELOY ALONSO

La escuadra y el cartabón oviedista

Relevo de Folch, Tejera encarna esa combinación de talento y garra del nuevo proyecto azul | Segundo en balones robados, el catalán se estrenó como goleador en Cádiz para prolongar la condición de invicto del conjunto carbayón

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Miércoles, 5 de septiembre 2018, 04:21

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«Confiad en vosotros», grita con signos de ronquera a sus jugadores Juan Antonio Anquela, que afina la salida de balón de su equipo. Con un nutrido grupo de espectadores pueriles en la grada, a resguardo de la llovizna que cae sobre El Requexón, el entrenador jienense emplea su ejercicio de cabecera para ahondar en los automatismos de su equipo y traza la hoja de ruta para el fin de semana, un boceto sobre el que edificar un buen resultado que prolongue la condición de invicto del conjunto carbayón.

Los problemas físicos dejaron en el dique seco en las tres primeras jornadas a Ramón Folch, consolidado como la extensión del técnico jienense sobre el césped durante su primera temporada, y ese rol de capataz lo está asumiendo Sergio Tejera. De Reus a Nou Barris, el acento catalán sigue estando presente en el ritmo oviedista, más acompasado que el curso anterior en la gestión de la posesión sin desoír el leitmotiv de guardar el orden sin él cuando es propiedad del adversario.

Una mezcla entre la percusión y la cuerda que pretende armonizar en su segundo curso en la dirección de la orquesta azul Anquela, que ha otorgado a Tejera la potestad de ajustar el metrónomo. Reubicado como pivote posicional, por delante de los centrales y con un peso trascendental en la base de la jugada después de las molestias en la rodilla que padeció Ramón Folch en la puesta a punto para el inicio del campeonato liguero, el barcelonés ha respondido a esa combinación de talento y garra que los azules ambicionan asentar en su reformada sala de máquinas.

Como vértice más cercano a su zaga en ese triángulo en la medular dentro del 1-4-3-3 que el conjunto carbayón está consolidando desde el arranque de la pretemporada a comienzo del mes de julio, encarna esa versatilidad que persigue su entrenador. Encargado de inaugurar oficialmente el capítulo de incorporaciones este verano, el barcelonés era una pieza codiciada por varios equipos de la categoría a los que el club carbayón consiguió adelantarse para añadirla a su engranaje. «Viene ya de largo», confesó sobre una historia con el Real Oviedo que el pasado 19 de agosto escribió su primera página liguera, trazada con su habitual vocación creativa enmarcada en una faceta de guardaespaldas en la medular que ha acentuado en los dos encuentros consecutivos a domicilio. Segundo oviedista en recuperaciones tras Javi Muñoz, con 23 balones interceptados al adversario en este arranque liguero, en Cádiz coronó su gran actuación con su bautismo goleador con la camiseta azul.

Una diana en el tiempo añadido para rescatar un punto y prolongar la condición de invicto. «Este equipo tiene unos cojones enormes», declaró con las pulsaciones todavía disparadas en la entrevista a pie de campo sobre el césped del Carranza, sintetizando esa capacidad de reacción para sobreponerse a ese gol recibido con una miscelánea de despliegue físico y juego asociativa que ejemplifican esa parcela ancha compuesta por él, Richard Boateng y Javi Muñoz.

Con la madurez añadida a ese talento por el que el Chelsea desembolsó 250.000 euros para asegurarse sus servicios cuando todavía era un adolescente, mueve los hilos de un equipo que ha superado en porcentaje de posesión a su rival en dos de los tres choques disputados y anhela sumar su primer triunfo como local, en un Carlos Tartiere que le impactó cuando lo pisó por primera vez con la camiseta del Mallorca, con apenas 18 años. «Para nosotros fue espectacular jugar ese día», confesó el pasado 3 de julio durante su presentación, acompañado por César Martín, que mostró su confianza en que lograse erigirse durante esta temporada en «un jugador que marque diferencias». Una esperanza que comienza a convertirse en realidad.

Síguenos en:

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios