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Encuentro entre el Real Oviedo y el Osasuna.

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Encuentro entre el Real Oviedo y el Osasuna. Álex Piña
Real Oviedo

El Real Oviedo acaricia el 'play-off'

El cuadro azul suma una nueva victoria en un campo anegado por las fuertes lluvias

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Domingo, 10 de diciembre 2017

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El Real Oviedo ha logrado su tercera victoria consecutiva y se asoma a los puestos de ‘play off’ después de imponerse al Osasuna en un partido de entrega total y garra sobre un terreno de juego que no permitía otra cosa. Un gol de Diegui Johannesson en el primer tiempo fue suficiente para llevarse el triunfo tras una buena primera mitad y una segunda de sacrificio y entrega.

Anquela apostó de inicio por los mismos once que la pasada jornada se habían impuesto al Lorca. El descartado de los 19 convocados fue el defensa argentino Valentini.

El campo no estaba para florituras y cada balón lo había que pelear con los rivales y con los charcos que poblaban muchas zonas del campo. Pronto se pudo comprobar que los azules se adaptaban mejor a las condiciones adversas y eran los que llevaban el peso del encuentro, que se disputaba más en el campo navarro.

Real Oviedo

Alfonso; Carlos Hernández, Forlín, Christian Fernández; Diegui Johannesson, Folch, Roch, Mossa; Yeboah (Verdés, m.90+1), Linares (Hidi, m.89), y Saúl Berjón (Viti, m.73).

1

-

0

Osasuna

Sergio Herrera; Lillo, Aridane, Unai García, Clerc (Xisco, m.34); Torró, Fran Mérida, Quique González, Roberto Torres (Kike Barja, m.71), Sebas Coris (Tato, m.85) y David Rodríguez.

  • Goles 1-0, min. 9: Diegui Johannesson

  • Árbitro Vicandi Garrido, del Comité Vasco. Mostró tarjetas amarilla a Rocha por los locales y a los visitantantes Fran Mérida, Lillo,

  • incidencias El terreno de juego, pese a los esfuerzos de los operarios antes del inicio del encuentro, presentaba mucha agua en algunas zonas. En la grada visitante unos dos centenares de seguidores navarros. Un cartel de publicidad del fondo norte se desprendió y produjo un corte a un aficionado.

A los cuatro minutos llegó la primera ocasión para adelantarse en el marcador, al señalar el árbitro un penalti del portero Sergio Herrera sobre Folch. Sin embargo, el lanzamiento lo desperdició Rocha, que lo mandó fuera a la izquierda del portero. Lejos de minar el ánimo de los de Anquela, el error le metió más en el partido.

Así fue como, cinco minutos después, Linares ganó un balón en la izquierda, lo puso al área, donde llegó Diegui Johannesson para adelantarse a todos y cabecear al fondo de la red.

El conjunto ovetense se sostenía mejor que los navarros en el complicado terreno de juego y dejaba claro que había entendido mejor lo que requería el partido, que no era otra cosa que poner más intensidad y no complicarse la vida.

Hasta tal punto los de Anquela se adaptaron mejor al juego, que uno de los jugadores a los que peor parecía podía irle el juego, el ghanés Yeboah, era de los más destacados, por su aportación al trabajo defensivo y fue capaz de tener el balón y protagonizar muchas de las jugadas de ataque de los ovetenses.

En defensa Forlín mandaba con autoridad y era capaz de contener los tímidos intentos de los visitantes, que no acababan de encontrar su sitio en el campo. La primera mitad acabó sin que Alfonso casi tuviera que manchar su uniforme blanco con el barro que había en abundancia el área.

La situación del terreno de juego hacía que las jugadas a balón parado cobraran una importancia trascendental. Así fue como llegó la primera ocasión de los navarros, en un remate fuera de Unai García.

Los navarros dieron un paso al frente en la reanudación y comenzarona a encerrar a los azules en su campo, que ya no tenían tanta facilidad para salir con el balón controlado y empezaban a pasar por algunos apuros.

Anquela tuvo que retirar de campo a Saúl Berjón, con molestias, dando entrada a Viti en la derecha, con lo que Yeboah pasó a la izquierda.

Los azules se defendieron como pudieron ante un Osasuna que se volcó sobre la portería de Alfonso. El apoyo desde la grada ayudó al equipo cuando peor lo estaba pasando y así fueron transcurriendo los minutos hasta el pitido final que fue recibido con alegría por parte de la hinchada local.

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